Una serie de videos difundidos en redes sociales exponen la gravedad de la crisis sanitaria que enfrenta La Habana, donde montañas de basura se acumulan en las calles durante días, incluso frente a edificios religiosos, mientras los vecinos claman por soluciones.
Las grabaciones, filmadas y compartidas por el opositor y expreso político Silverio Portal en su cuenta de Facebook, corresponden a distintos puntos de la capital y muestran grandes cúmulos de desechos orgánicos, plásticos y cajas esparcidas por las calles.
Al comentarlas, el autor expresa su desesperación y denuncia la “inmoralidad” y el “abandono total” de las autoridades.
“Vivimos dentro del desecho, dentro de todo lo malévolo, y estamos aspirando enfermedades”, lamenta el denunciante en uno de los videos, señalando la inacción del gobierno y la falta de gestión en medio de potente brote de dengue y chikungunya.
El ciudadano destaca con indignación la presencia constante de basura frente a la iglesia de San Judas Tadeo, en Centro Habana, donde —según dice— ni las autoridades religiosas ni las civiles han intervenido.
“Si por dentro el templo es limpio, no puede estar sucio por la parte de afuera”, reclama, mientras muestra el cúmulo de desperdicios que rodea la edificación.
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Las escenas más estremecedoras de las grabaciones muestran a personas hurgando entre los montones de basura, incluyendo a una mujer mayor que busca comida o materiales reutilizables.
El orador utiliza esas imágenes para denunciar el empobrecimiento y desesperación de innumerables cubanos, sobre todo personas de la tercera edad.
“Mira las madres cubanas cómo tienen que rebajarse para comer. Es el único modo que ella tiene para poder comer”, expresa con visible rabia y tristeza.
La denuncia también apunta directamente contra el liderazgo político de la isla. El orador menciona al presidente Miguel Díaz-Canel y otros representantes de la llamada “generación histórica”, a quienes acusa de incapacidad y desinterés frente a la crisis.
“Han puesto al ejército y a los militantes del Partido Comunista a recoger basura, pero el problema sigue igual”, afirma.
El mensaje, cargado de frustración y dolor, describe un cuadro de degradación social que va más allá de la insalubridad.
“Estoy cansado mentalmente”, confiesa el denunciante, atribuyendo la catástrofe a un sistema que, a su juicio, se mantiene “a costa del sufrimiento del pueblo”.
Mientras tanto, la capital continúa hundida entre basura, plagas y enfermedades, sin señales de una respuesta estructural. En medio de la desidia y el colapso higiénico, suena el último ruego del ciudadano ante la cámara: “Salud para el pueblo de Cuba.”
Especialistas del Ministerio de Salud Pública (Minsap) admiten que La Habana enfrenta una “crítica situación” por arbovirosis, aunque sin cifras precisas sobre contagios en municipios como Marianao, uno de los más afectados por el dengue y el chikungunya.
Soldados, oficiales y trabajadores civiles de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) encabezan desde hace semanas la llamada “Operación Limpieza”, una acción dirigida a mejorar las condiciones higiénicas de la capital.
El despliegue militar coincide con el lanzamiento de la “Operación Campana”, un plan piloto de recogida nocturna de basura en zonas con servicio eléctrico soterrado, precisó la Asamblea Municipal del Poder Popular de Centro Habana en un post en Facebook.
Las autoridades esperan extender el modelo si logra aliviar los puntos más críticos, aunque admiten que el déficit de equipos y la escasez de combustible siguen siendo los principales obstáculos para estabilizar el sistema.
La situación sanitaria de La Habana se ha vuelto uno de los temas más sensibles del país. El propio presidente Miguel Díaz-Canel ha encabezado varias reuniones de emergencia desde principios de octubre, exigiendo “control y disciplina” ante el deterioro urbano.
En una de esas sesiones, transmitida por la prensa estatal, el mandatario reprochó que muchos organismos estatales no se hayan incorporado a las labores de limpieza y criticó la falta de respuesta oportuna.
No obstante, reportes de la prensa local y testimonios como los de Silverio, muestran que los basureros improvisados y los contenedores desbordados siguen marcando el paisaje cotidiano en numerosos municipios.
Preguntas frecuentes sobre la crisis sanitaria y de gestión de residuos en La Habana
¿Cuál es la situación actual de la gestión de residuos en La Habana?
La Habana enfrenta una grave crisis de gestión de residuos, con montañas de basura acumulándose en las calles, lo que genera insalubridad y riesgos de salud pública. Las autoridades han intentado implementar operativos de limpieza, pero la falta de recursos y la ineficacia de las medidas adoptadas han impedido una solución sostenible.
¿Cómo está afectando la acumulación de basura a la salud pública en La Habana?
La acumulación de basura ha contribuido al aumento de enfermedades como el dengue y chikungunya, debido a la proliferación de mosquitos y otros vectores. Además, el deterioro ambiental y la falta de higiene exacerban los riesgos para la salud, especialmente en áreas con infraestructura sanitaria deficiente.
¿Qué medidas ha tomado el gobierno cubano para enfrentar la crisis de basura en La Habana?
El gobierno ha implementado operativos como la "Operación Limpieza", movilizando a soldados y trabajadores estatales para recoger basura. Sin embargo, la falta de recursos y planificación sostenibles ha limitado la efectividad de estas iniciativas, dejando gran parte de la ciudad aún afectada por la acumulación de residuos.
¿Qué opinan los ciudadanos sobre la gestión de la crisis sanitaria en Cuba?
Los ciudadanos han expresado su frustración y desesperación en redes sociales, acusando al gobierno de ineficacia y desinterés. Muchos señalan que la falta de respuesta efectiva ha provocado un colapso sanitario y social, intensificando el descontento y el escepticismo hacia las autoridades.
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