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Para la masa
- 6 huevos
- 1 ¾ taza de harina de trigo
- 1 1/3 taza de azúcar
- 50 gramos de cacao
- 1 cucharadita de polvo de hornear o bicarbonato
- 1 pizca de sal
- Mantequilla para engrasar
Para la crema
- 300 gramos de mantequilla
- 400 gramos de azúcar glass
- 1 cucharada de extracto de vainilla
- 4 cucharadas de leche
- 80 gramos de cocoa puro 100% o chocolate
Para el almíbar (opcional)
- 200 gramos de azúcar
- 200 ml de agua
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 cucharadita de jugo de limón
- 1 ramita de canela
- 1 cucharada de licor de almendras
Para esta elaboración revisé varias recetas. La mayoría de ellas no llevan almíbar, porque la crema de chocolate tiene un sabor muy intenso. Pero por lo general a los cubanos les gustan los dulces con almíbar y la receta que presentan Ángela García y Hans Geel en su libro Tartas del Mundo, la lleva. Mi sugerencia es que cuando vaya a montar el Tatianoff, según la consistencia de la panetela y el sabor de la crema, decida usted si desea incorporarla o no. Es a su gusto. Pero si la va a utilizar este sería el primer paso.
Ponga en una cazuela todos los ingredientes para hacer el almíbar. Colóquelos a fuego medio y remueva hasta que se diluya el azúcar. Déjelo hervir y retírelo. Es un almíbar ligero.
Precaliente el horno a 180ºC.
Necesitará dos moldes de igual medida. En este caso utilicé moldes desmontables de 15 cm de diámetro. Engrase los moldes con mantequilla y polvoréelo con harina. Resérvelos para más adelante.
Para hacer la panetela, separe las claras de las yemas. Bata las claras hasta tener el punto de nieve y comience a añadir el azúcar, poco a poco y sin dejar de batir. Debe formarse un merengue. No importa que no quede perfecto en picos, pero sí debe estar fuerte. Añádale las yemas, el extracto de vainilla y continúe batiendo hasta que estén bien integradas.
Una los ingredientes secos (harina, cacao, bicarbonato y sal) en una vasija, ciérnalos para evitar que queden grumos. Incorpórelos poco a poco al merengue con las yemas. Para este paso utilice una espátula dura que le permita hacer movimientos envolventes a la harina. Cuando termine de incorporar todo, la masa estará densa.
Eche la masa en los moldes. Cuide que quede dividida en partes iguales. Hornéela entre 25-30 minutos. Recuerde que cada horno tiene características propias, por eso es importante prestar atención al punto de cocción para que no quede cruda ni se pase. Para comprobar que la panetela está lista introduzca un palillo en el centro, debe salir seco. Cuando estén listas, saque las panetelas del horno y déjelas refrescar.
Para preparar la crema bate la mantequilla a temperatura ambiente, el azúcar glas, la leche y el extracto de vainilla. Obtendrás una crema espesa, añade el cacao y sigue batiendo hasta que quede perfectamente integrado.
Para montar el Tatianoff, primero prepare las panetelas. Como debemos conseguir varios pisos lo mejor es cortar ambas panetelas cuidadosamente por la mitad. Utilice cuchillo de pan, que permite un corte más parejo y no rompe la masa.
Una vez tenga listas las cuatro panetelas mójelas en el almíbar. Intente distribuir equitativamente, no moje una más que otras o el peso puede desequilibrar la tarta.
Coloque la primera panetela en la fuente o plato en que presentará su Tatianoff y añada crema. Cúbralo parejo pues de este paso depende el equilibro del cake. Repita la operación hasta que lo monte completamente. Unte crema por las paredes del Tatianof y decórelo a su gusto. En este caso usamos una manga pastelera para las flores, pero se puede decorar con fideos de chocolate y queda igual de lindo. La forma de las paredes la hice con el borde del cuchillo del pan, haciendo girar la tarta.
No se necesita una cocina profesional para hacer este postre. Es una receta divertida, con un intenso y delicioso sabor a chocolate que te traerá muchos recuerdos de Cuba.
¡Buen apetito!!